Avanzando en la carretera que discurre por vida y a poco que nos fijemos con interés, vemos cómo van quedando patentes los cambios en los hábitos de la sociedad y a los que a la empresa se refieren.
Nuevos escenarios que cada día están más presentes y con una mayor intensidad. Por ello, sería bueno que todo propietario/administrador/gerente empezara a pensar que lo mejor es organizarse bien y aceptar, sobre todo en lo concerniente a la empresa, que no se puede luchar contra el resultado final del negocio en el ultimo minuto. Debemos de romper la costumbre de reaccionar al final de año y siempre contra el agobio que representa el impuesto.
Estamos a punto de llegar al final del ejercicio y nos enfrentamos a querer ganar dinero en nuestro negocio. Como consecuencia y paradójicamente no pretendemos pagar el impuesto directo con el que se graba al lograrlo.
Si abordamos la tarea de tener que costear lo menos posible a la hacienda publica, no es cuestión de planteárselo en el mes de diciembre. La única forma de evitarlo es planificar la empresa y cerrar un plan en el mes anterior al ejercicio que debemos proyectar. Con ello, aceptemos que la lucha hay que realizarla durante el desarrollo del ejercicio económico, durante los doce meses, y no en los últimos.
Además, conviene que sepamos que este año se han producido innumerables cambios legislativos que nos afectan muy directamente, así que debemos prepararnos para el fallo y sus derivaciones.
Como consecuencia de lo anterior, todo asesor, abogado y financiero/contable queda directamente implicado en cualquiera de los errores, realizados a propósito o no, que la empresa pueda cometer y que quedaran imputados en la causa. Según últimos cambios en la Ley, éstos se resolverán por vía penal.
Por tanto y a modo de conclusión, no creo que a partir de ahora los asesores de todo tipo acepten trabajar sin el orden legal necesario en los que la empresa debe de cumplir así que, la única forma, o al menos la más eficaz, es planificar el año económico.
Por último, ¡aviso para navegantes, vienen tiempos muy complejos!, aceptémoslo y exijamos la profesionalización de la gestión en todos los niveles desde ¡YA!