4 fundamentos para el éxito de un proyecto empresarial:
1 Conocer perfectamente al mercado objetivo al que dirigirnos.
2 Alinear nuestros productos/servicios con las necesidades y/o aporte de soluciones que el mercado demanda.
3 Elegir, formar y apoyarse en el equipo adecuado, dirigiéndolo de forma eficaz.
4 Ajustar los extremos de la cadena de suministro: clientes- proveedores con la parte interna de la empresa.
No podemos afirmar que cumplir con los puntos expuestos sea (como casi nada en la vida) garantía total de éxito, pero sí pondrá para el empresario la probabilidad más a favor que en contra, y la única de llevar a cabo estas pautas de manera eficaz es a través de los datos que se pueden analizar para:
- obtener ideas, predecir tendencias y detectar nuevas oportunidades.
- facilitar la planificación y la toma de decisiones.
- detectar más rápidamente los problemas, es decir, elevar la capacidad de reacción y respuesta.
¿Cómo nos ayudan los datos?
Todas las empresas tienen como resultado de sus actividades un montón de números,notas, apuntes,… pero en general esos datos no acaban convirtiéndose en información, lo importante no es la cantidad que tenemos sino qué hacemos con ellos.
Es cierto que la mayoría tienen herramientas de gestión de datos, pero muy pocas tienen definido (y mucho menos implementado) un verdadero sistema de información, ya que muchas se ven sobrepasadas y piensan que es algo reservado a grandes multinacionales.
Pocos negocios tienen un sistema de información
Para un futuro inmediato las empresas deben de pensar más allá de lo datos obvios que resultan de las actividades de ventas, producción, logística, etc. Porque el entorno se ha vuelto inestable, cargado de incertidumbres, y no parece que vaya a cambiar en mucho tiempo, por lo que para poder luchar en un terreno así es fundamental manejar información.
La información es el producto que obtenemos cuando transformamos los datos y para ello deberían todas las empresas poner en prioritario su transformación digital, aprovechando las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, y no deberían confundir un ERP con un sistema de información, el ERP es solo una herramienta dentro de un sistema, como también lo es un CRM o un SGA.
La información es el producto que obtenemos cuando transformamos los datos
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